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Dr. César Ramírez: «Más allá de la vocación»

Dr. César Ramírez: «Más allá de la vocación»

Comenzábamos la nueva edición de Cenas con Chispitas con una cena que sacamos fuera de programación. Recibíamos al Dr. César Ramírez, fundador de Bisturí Solidario. El tema: “Más allá de la vocación”. El espacio no podía ser más adecuado, la Fábrica de Cervezas Victoria. César se siente malagueño, muy malagueño, y está orgulloso de la generosidad de su tierra.

Todo estaba dispuesto para escuchar y disfrutar de la compañía del Dr. César Ramírez. Alguien que ha sido capaz de ir más allá de lo que es su vocación de médico; ha querido ayudar a personas que no tienen la suerte de poder acceder a un sistema sanitario como el nuestro. Evidentemente, todo es mejorable, pero debemos sentirnos muy afortunados. En los países a los que lleva su labor, su profesionalidad, sus conocimientos, las personas a las que entrega su tiempo, se encuentran en muchas ocasiones en condiciones muy precarias. Así que César, además de llevar la medicina y curar sus problemas de salud, les lleva esperanza y vida. 

De nuevo, de la decoración floral de Fábrica se encargó Las Flores de Reding. Siempre acorde al espacio. 

La Fábrica de Cervezas Victoria ha resultado ser un anfitrión de lo más versátil. Acoge durante todo el año actividades de tipo empresarial, social, cultural y por supuesto, gastronómico. Visitarla concertando una visita guiada se convierte en toda una experiencia. Si nunca habéis ido os invito a reunir a un grupo de amigos y concertar una a través de su web. Es increíble cómo se transforma el espacio hasta convertirse en tan acogedor para nuestras cenas. 

Es curioso, porque hace tan sólo un año, es esa misma fecha, un 7 de marzo en el mismo lugar nos acompañaba Esther Ráez, la hermana de Pablo Ráez. Él no pudo vencer al cáncer, pero nos dejó un gran aprendizaje y un mensaje de amor. Lo que César Ramírez nos dejaría esa noche también sería un testimonio de amor y entrega a los demás.

 

Los asistentes

Esa noche César Ramírez se iba a llevar una sorpresa. Silvia Bayolo propietaria de la agencia Quest Corporate Travel invitó a cenar a la madre de César, María del Pilar Plaza y al hermano de César, Óscar Ramírez, que es médico de familia y trabaja en el SAS. 

Silvia Bayolo

Óscar Ramírez, María del Pilar Plaza y César

Otra sorpresa que se llevó César fue el de reencontrarse con dos compañeras de los años de Universidad. Victoria Sánchez es pediatra y trabaja en el Servicio Andaluz de Salud. Vino con Elena Gaspar, de Clínica de Medicina Estética Elena Gaspar.

Elena Gaspar y Victoria Sánchez

Dori Pérez, tras 16 años en el sector de la moda, dio el paso de escuchar a su corazón y actualmente se está formando como coach para ayudar a otras personas. 

Dori Pérez

María Consuelo Santos gestiona inmuebles familiares, vino acompañada de su hija, Consuelo Guerrero, que es ingeniera. 

Consuelo Guerrero y Consuelo Santos
Consuelo Guerrero y Consuelo Santos

Benjamín Escobar es médico de familia ya jubilado y vino acompañado por su mujer, Isabel Antúnez, profesora de Economía prejubilada. 

Benjamín Escobar e Isabel Antúnez

Lola de la Torre es responsable comercial y del departamento internacional del Hospital Quirón Salud en Málaga y Violeta Segura, responsable de marketing y comunicación del hospital. Las dos trabajan en el mismo recinto hospitalario que César pero querían escucharlo y disfrutar de él en otro contexto. Se declararon admiradoras de la labor que está está haciendo César Ramírez con Bisturí Solidario y destacaron su categoría personal y  profesional. 

Lola de la Torre
César Ramírez con Violeta Segura

Ana Cardiel es gerente en AMC International Investments. Y los que sois seguidoras de nuestros eventos ya la conoceréis. 

Ana Cardiel

Guillermo Villalva, es psicólogo prejubilado de Deutsche Bank y Sandra Galeote es psicóloga, directora del Centro de Bienestar Social de Alhaurín de la Torre. Juntos están cursando un master de neuropsicología. Están casados y  vinieron animados por Manuel Toledo, uno de los fans de nuestras cenas. 

Sandra Galeote y Guillermo Villalba

Manuel Toledo volvió a venir con Mari Carmen Sánchez. La Fábrica de Cervezas Victoria fue testigo de su primera cena con Chispitas en el encuentro que tuvimos con Laura Chica. Desde entonces han venido a todas las que su agenda le ha permitido. 

Mª Carmen Sánchez y Manuel Toledo

Manolo Navarro forma parte de ese grupo de incondicionales. El arquitecto, publicista, empresario y actor; es como César de esas personas que no le dan muchas vueltas a si tienen tiempo o no, simplemente lo hacen. 

Manolo Navarro con César mostrando una de las pulseras solidarias

César vino acompañado por su mujer, Marta Domínguez, médico endocrino. Una pieza fundamental en toda esta historia, ya que Marta ha respetado la decisión de César y le ha apoyado. Lo que supone que durante sus viajes ella se tiene que hacer cargo de sus tres hijos. 

Marta Domínguez y César

También acompañó a César, Carolina Porras, responsable de prensa y Social media de Bisturí Solidario. 

Carolina Porras

Actúo como anfitriona Genoveva Ferragut, responsable de comunicación y relaciones externas, que es nuestra principal aliada para el desarrollo de las cenas en la Fábrica de Cervezas Victoria. 

Genoveva Ferragut

 

07 de marzo de 2019. Cenas con Chispitas

 Lugar: Fábrica de Cerveza Victoria

Ponente: Dr. César Ramírez 

El tema: “Más allá de la vocación”

El ponente 

Tener esa noche con nosotros al Dr. César Ramírez era un auténtico lujo, y era un lujo en muchos sentidos. Por un lado, está considerado uno de los 100 mejores médicos y está entre los 4 mejores cirujanos de España según la revista Forbes. Ees el único cirujano de la Unión Europa que ha conseguido superar con éxito la más alta certificación en 6 especialidades distintas de cirugía; entre las que destaca Cirugía del cáncer y además es Director del Instituto Quirúrgico de Andalucía. Es Jefe del Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Quirón. Fue nombrado Malagueño del año 2018.  Leyendo esa parte de su currículum podríamos decir que tenemos el lujo de contar con un grandísimo profesional. Por suerte para nosotros en España y en Málaga contamos con grandes profesionales, pero creo que el verdadero lujo de esa noche era contar como ponente con una gran persona. 

César Ramírez ha ido más allá de su vocación en un acto de profunda generosidad. Y es generoso porque no le sobra el tiempo, porque lo que está haciendo en países subdesarrollados supone asumir más responsabilidades de las que ya tiene entregando sus conocimientos, su sabiduría y su tiempo a los que más lo necesitan. A esos que no saben lo que es tomarse un Ibuprofeno cuando les duele la cabeza. A esos que no saben lo que es poner una hoja de reclamaciones en el Centro de Salud porque han tardado tres horas en atenderle en urgencias cuando están tan resfriados. A esos que se mueren o sufren tremendos dolores por enfermedades que aquí, ya, no revisten la mayor gravedad. Pensar en ellos es ser conscientes de que lo que tenemos aquí y elevamos a categoría de problemas, no son más que problemas en el primer mundo. 

Comenzó colaborando y viajando con otras ONGs hasta que decidió colaborar pero creando su propia asociación, Bisturí Solidario, que en estos momentos se encuentra en proceso para convertirse en una fundación. 

 

La cena

Esca Catering fue una vez más el encargado de servir la cena en Cervezas Victoria.

Tataki de lomo de buey marinado en jengibre y croqueta de pulpo a la gallega

Huevo poché sobre cremoso de patata y boletus

Corvina asada con aceite de aceitunas negras, piñones tostados con salteado de puerros y trigueros.

Manjula con culis de maracuyá

Todo maridado con Cerveza Victoria y el postre con Cerveza Victoria negra.

 

La ponencia 

A los médicos le presuponemos vocación por las características de la labor profesional que van a desempeñar a lo largo de su vida. De hecho, juran el juramento Hipocrático, con lo que se comprometen al buen ejercicio de la medicina más allá de horarios o contratos laborales. César tenía claro desde niño que quería estudiar medicina, que se quería dedicar a curar a otras personas, y concretamente, siempre, cuando le preguntaban qué quería ser de mayo, él decía que cirujano. Quizás sin entender muy bien aún la magnitud de desempeño de esa profesión. 

En la adolescencia, como a la mayoría, le asaltaron las dudas. Era la época en la que los estudiantes excelentes, como era su caso, se decantaban por Telecomunicaciones y hasta dudó si hacer Matemáticas. Pero la vocación fue más fuerte y gracias a eso hoy contamos con un gran cirujano. Una decisión de la que no se ha arrepentido ni un día de su vida: “Si volviese atrás volvería a hacer medicina y volvería a coger la especialidad que cogí. No cambiaría nada de mi carrera profesional, absolutamente nada. Y eso quiere decir que has cogido el camino adecuado. Me siento orgulloso de levantarme todos los días con la ilusión de ir a trabajar y que trabajar para mí no sea nunca una carga, ni un sobreesfuerzo, sino que sea todos los días la ilusión de poder hacer cosas muy allegadas”.

Cuando hay tanta vocación, tantas ganas, tanta ilusión, también nos generamos expectativas de cómo será trabajar en ello. Todos sabemos que nuestro sistema sanitario, aún siendo uno de los mejores del mundo, padece algunas carencias. Algo a la que César Ramírez se ha tenido que enfrentar en el ejercicio de su profesión. Otro aspecto que ha sido chocante para él es coincidir con compañeros que no anteponen al paciente a sus horarios, o que no tienen ese punto de vista humanista de la medicina. 

«Creo mucho en la relación médico-paciente, que es el eje de la medicina, y cuando tú ves que la gente confía en un médico y que ese médico no es capaz de devolver al paciente la confianza que ha puesto en él, o ves que eso no se corresponde con lo que esperabas, pues te desilusiona. Pero el mayor shock en mi carrera profesional es ver el funcionamiento del sistema. Me he encontrado con un sistema en el que el talento no se valora, y en el que digamos el mando y la política siguen estando por encima de lo que son los valores puramente profesionales. Entonces, una cosa que tú tienes idealizada, te encuentras luego, que no es así. 

Pero bueno, si tienes empuje y ganas y eres capaz de querer que las cosas sean de la manera que tú lo entiendes, pues también emprendes una pelea y una lucha que ha sido un poco lo que he hecho siempre. Intentar que las cosas cambien, no conformarme”. 

Solo desde ese carácter inconformista se entienden las elecciones que ha hecho en su vida y que le han llevado a entregarse a su profesión en cuerpo y alma, incluso más allá de lo que es un trabajo remunerado. Un compromiso que le lleva a renunciar a otros momentos, a hacer sacrificios, uno de los mayores es el dedicar menos tiempo a su familia. Por ese motivo, su entrega lo trasciende a él. 

“Siempre he tenido la suerte de que no he tenido nunca una mala cara, ni un mal gesto, ni un “esto no lo hagas” por parte de mi mujer. Todo lo contrario. He tenido siempre su apoyo. Cuando me conoció yo ya tenía parte de mi carrera y ha entendido siempre que mi carácter y mi forma de ser en la profesión iba a marcar cómo me iba a ir a mí y cómo nos iba a ir a toda la familia. Ella es una persona brillantísima, una brillantísima profesional y una magnífica madre. 

Me encantaría de dedicarles más tiempo y poder estar más tiempo con ellos. Pero bueno, es la vida que he elegido vivir, e intento disfrutar al máximo del tiempo que estoy con ellos. He peleado mucho por llegar donde he llegado y donde yo he llegado, llega ella también, llega nuestra familia”.

Dedica jornadas maratonianas a su trabajo en el hospital, y aún así ha conseguido sacar tiempo, que se quita de sus vacaciones, para viajar y ayudar en países en vías de desarrollo. 

“En mi vida nunca me he conformado con que las cosas sean como tengan que ser y cuando algo no me gusta, lo he intentado cambiar para bien. El escenario donde yo ayudo a la gente es un hospital privado maravilloso, que me ha dado la oportunidad de poder desarrollar mi carrera, a mi antojo, de poder hacer y crear un modelo de trabajo, que mucha gente intenta ahora copiarlo, porque ha sido un modelo de éxito. Pero tenía la sensación de que quería hacer más por la gente”, entonces César nos explicó cómo tuvo que renunciar a su trabajo en la sanidad pública ya que el puesto que se le dio estaba en Sevilla y quería permanecer en Málaga. Entró en la sanidad privada pero sentía que quería hacer algo ese algo más: “Quería ayudar a la gente en otros escenarios y me planteé colaborar con alguna ONG hace cuatro años. Fue una experiencia buena y luego he tenido más. Así que decidir tomar el mando y crear Bisturí Solidario”. 

Así en este tiempo en cada una de las misiones en las que ha participado se ha entregado al máximo para ayudar a otras personas, aunque fuese en jornadas de 16 horas diarias en semanas intensivas y en espacios complicados: “Es extrapolar el modelo, la intensidad y las ganas de ayudar a la gente. Entras en contacto con la medicina en su más pura esencia, tú estás desvestido de todo lo que es tu ambiente, de tecnología, de personal preparado, de tu consulta habitual y estás en un sitio en donde lo que hay es una mesita, donde viene gente, además, con enfermedades distintas que te obligan a ver una medicina totalmente distinta a lo que hemos visto antes. La medicina en estos países, no es la medicina que vemos aquí en España.

 

La esperanza de vida de media de la gente está en cincuenta y poco años… Por tanto, la gente no vive tanto tiempo como para que sus células se malignicen en la mayoría de los casos y hagan cánceres. Se mueren de otras cosas, enfermedades infecciosas o cosas básicas que aquí tratamos y se curan, y que allí como no se pueden tratar y acaban con ellos cuando son jóvenes”. 

Allí las herramientas son sus manos, su conocimiento, y sus ganas de ayudar aunque las condiciones en la mayoría de las ocasiones sean extremas. Trabajar de esa forma cambia la forma de César de ver muchas cosas al volver a Málaga, aunque es consciente de que aquí, en su día a día, también tiene mucho que aportar por lo que no se plantea dejar Málaga y dedicarse de lleno a estas misiones, aunque sí aumentar su implicación con la creación de la Fundación Bisturí Solidario. 

“Cuando vienes de estar unos días o unas semanas en África con mucha intensidad, te subes al avión, llegas a Málaga y ves cómo vivimos, y piensas en la gente que se queda allí, te da que pensar y das vueltas a la cabeza. Quería dar un paso adelante y hacer más cosas y no conformarme simplemente con ir allí de vez en cuando. A lo mejor no podemos aportar soluciones a los que viven allí, pero lo que podemos hacer es aportar muchos granos de arena”, nos dijo. 

Normalmente en muy pocos días tienen que ver y operar a cientos de pacientes de patologías no muy complicadas que permitan llegar a mucha gente. Uno de los objetivos que quieren marcarse es ofrecer formación a personas de allí para que puedan implementar nuevas técnicas en quirófano y que no quede solo en el trabajo que desempeñan ellos cuando van.

“Cuando tú vas a un sitio como a Nigeria o a Kenia, buscas que haya mucha población a la que se le pueda beneficiar y en poco tiempo. Yo creo que hay patologías, que están bastantes definidas, sobre todo, las hernias, que no son de alta complejidad y que un médico o un cirujano de allí, con un poco de entrenamiento, puede desarrollar y hacer en la población si tienen un material quirúrgico básico. Cada vez que voy compro tres o cuatro cajas de material y se las dejo para que vayan teniendo tecnología. Hay gente de aquí que está dispuesto a irse tres, cuatro, cinco meses, a estar allí enseñándoles, porque en dos semanas no se puede”, ese es uno de los objetivos que pretende alcanzar gracias a la Fundación. Porque para hacer eso se necesitan fondos, y ya hay personas y empresas interesadas en contribuir.  

Mientras se crea la fundación sigue colaborando con las ONGs que ya lo hacía, que por su antigüedad y estructuras tienen acuerdos con los países en los que actúan, pero quedan cosas por mejorar que permitan a los sanitarios viajar en más ocasiones y en mejores condiciones: “Cuando viajas con estas ONGs los médicos y las enfermeras se lo tienen que pagar todo de su bolsillo. Los billetes a África no son baratos, y cuando tú vas de fuera te buscan unos hoteles muy cutres por los organizadores locales te quieren cobrar una pasta y tienes que negociar con ellos. Y eso con todo. No te ponen el precio de su país, donde la gente vive con tres dólares al día, quieren que tú pagues 60 dólares por dormir en un sitio donde no te cambien la sábana todos los días, cutre a más no poder, pues evidentemente, algo falla. Saben que tú lo puedes pagar, saben que tienes la voluntad de ayudar. Estas fundaciones no tienen financiación ninguna, y eso es lo que hay que mejorar”. 

 

César Ramírez confía en que para poner en marcha la Fundación y mantenerla viva va a contar con los suficientes apoyos. En su carrera profesional ha ayudado a muchas personas y que ven en esta vía una forma de mostrarle su agradecimiento. Las acciones que han puesto en marcha hasta ahora para recaudar fondos, siempre han sido una auténtico éxito. 

Málaga es una ciudad muy generosa, y donde la gente se vuelca con lo que haces. Queremos que todo el mundo entienda que lo que hacemos aquí, somos capaces de hacerlo también en otro lado donde hay gente mucho más necesitada. No deja de ser un modelo de “cadena de favores” con la que se pueden conseguir muchas cosas y prestar mucha ayuda”. 

Él suele viajar con un enfermero que se llama Paco, y en cada uno de sus viajes, desde tiempo antes, van preparando el material que se van a llevar. Contar con profesionales que se sumen a las misiones concretas tampoco resulta especialmente complicado gracias a internet. Evidentemente no todo el mundo repite, pero sí hay médicos y enfermeros que prueban la experiencia. “ Por internet dices: «Quiero montar una misión para ir a tal sitio». En 48 horas tienes treinta o cuarenta personas ofreciéndose a nivel de España. Cirujanos, anestesistas, enfermeros, que todos te dicen que quieren venir. Pero la gente no suele repetir mucho. Hay gente que quiere colaborar yendo una vez al año y decidí que lo que quería era coordinar y hacer posible todo esto. Puedes ver el partido desde la grada o puedes estar en el campo de juego. Lo importante en la vida, en todas las facetas profesionales, es tener iniciativa, querer hacer cosas. Muchas te van a salir muy bien. Algún proyecto puede no irte bien, pero si tú tienes la idea, las ganas y el empuje, al final las cosas salen”. 

Lo que llama la atención al escuchar a César es que más allá de poner en esta causa el corazón y las ganas de contribuir, tiene una visión desde un punto de vista de organización empresarial para hacer que tanto la asociación, por el momento, como la fundación, próximamente sean viables. Solo así pueden afrontar el crecimiento que quieren experimentar:  

“Al final lo que estamos creando es una empresa, aunque sea sin ánimo de lucro, que presta servicios de salud y o sabes sobre ello o te la cuelan por todos lados. Yo tengo formación en economía de la salud, en dirección de organizaciones sanitarias, y esto en paralelo a la medicina. Cuando tienes un proyecto como el que tengo, tienes que saber cómo funcionan las asociaciones sin ánimo de lucro, cómo funciona la fundación, qué beneficios tiene, qué tipo de control fiscal tiene y cómo tienes que moverte. Es inevitable, si no tienes esa visión, no vas a tener recursos y sin recursos no se puede ayudar a lgente de fuera. 

Y todo esto sin perder de vista mi trabajo, porque aparte de esta parte solidaria de lo que estamos hablando, yo dirijo un equipo de altísimos profesionales, de personas de altísimo nivel, y en una empresa que además nos pide resultados, no puedes bajar la guardia”.

Bisturí Solidario ha colaborado por ejemplo en la construcción de un pabellón quirúrgico en Uganda. Los fondos se recaudaron gracias a una cena benéfica que se realizó en Málaga: “Querían poner una placa con mi nombre cuando se inaugure, y les he dicho que no, esto no va de personalismos. Si quieren que en la placa ponga que ese hospital se ha construido con la ayuda de la gente de Málaga”. 

 

Entre los proyectos que tiene ahora mismo César Ramírez con Bisturí Solidario están el llegar a zonas concretas de Liberia y Tanzania y ver sus necesidades para contribuir para que puedan trabajar en mejores condiciones. 

Cuantas veces nos escudamos en que no tenemos tiempo para no ayudar o no dar más de nosotros mismos. El ejemplo del Dr. César Ramírez nos demuestra que querer es poder y cuando la voz y la inquietud nace desde el corazón es difícil de acallar. 

En la mesa surgieron nuevas dudas que César amablemente fue respondiendo. Profundizó contando situaciones que se viven en esos países, realidades que nos resultan muy alejadas y que te hacen valorar, al oírlo, la suerte que tenemos de haber nacido en un país avanzado que ofrece tantas posibilidades. 

Los problemas de seguridad, la corrupción de países que en materias primas son ricos, las enfermedades a las que tienen que enfrentarse sobre el terreno, la importancia de las vacunas antes de viajar, o la generosidad de las empresas proveedoras de material sanitario cuando se les pide que colaboren en estos proyectos, fueron algunos temas que se trataron. 

Como contaba César durante la entrevista, lamentablemente, no podemos cambiar la situación de esos países pero sí podemos contribuir a que muchas personas, aportando nuestro granito de arena, tengan una mejor calidad de vida. 

Si quieres ayudar, hacer una donación, o convertirte en socio, puedes contactar con ellos haciendo clic en cualquiera de estos enlaces web, Facebook, Instagram.

El Dr. César Ramírez y su trabajo a través de Bisturí Solidario ya es parte de Cenas con Chispitas. Gracias por hacernos participe de una labor tan extraordinaria y compartir con nosotros esta aventura que nace desde el corazón pero que está tomando forma desde la cabeza, con la precisión milimétrica de un cirujano en el quirófano, para que llegue cada vez a más personas. 

Gracias a la Fábrica de Cervezas Victoria por acogernos una noche más, y por supuesto gracias a todos los que os sentasteis con nosotros a la mesa. 

Ya está disponible la nueva programación de Cenas con Chispitas. Más información-> Aquí

Redacción: Ana Porras

Fotografía: Manuel Martos

Instagram Cenas con Chispitas

Instagram Bisturí Solidario 

Web Dr. César Ramírez

Web Bisturí Solidario

Agradecimientos

Fábrica de Cervezas Victoria

Diseño imagen, web y filmación video: The Branders and Co

Audio ponencia transcripto por Atexto

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